Avances en diseño industrial
Publicado: 21.ENE.2024
Las continuas mejoras tecnológicas que se producen en la fabricación de accesorios y componentes que posteriormente son aplicados a la industria o la arquitectura, hace posible el desarrollo de nuevos avances que mejoran la eficiencia y seguridad de instalaciones, máquinas, también del diseño estructural de edificaciones y de las estructuras arquitectónicas en general.
En este contexto de búsqueda de la calidad y la mejora continua en la producción, uno de los productos que mayor innovación ha experimentado en los últimos años ha sido la fabricación de tubos metálicos flexibles, un componente que se antoja indispensable en los tiempos actuales, de muchísima aplicación en el mundo industrial, en el diseño de máquinas, o en el campo de la arquitectura y la construcción.
Contar con un servicio de calidad para suministros industriales como los que proporciona la empresa Witzenmann es fundamental para tener a disposición, siempre y con toda seguridad, de una amplia oferta de elementos y de componentes metálicos flexibles, muy necesarios para el diseño de aquellas situaciones donde, por ejemplo, sea importante mitigar la transmisión de vibraciones o la de compensar movimientos debidos a los gradientes de temperatura que suelen producirse en los sistemas de tuberías.
Pero, ¿qué son los tubos metálicos flexibles?
Los tubos metálicos flexibles son componentes cilíndricos de capa fina que se fabrican a partir de una estructura ondulada metálica, hecha de una aleación de níquel, de acero inoxidable o acero galvanizado, o bien fabricado mediante un proceso continuo de perfilado y enrollado en espiral de una cinta de metal laminado en frío.
Los tubos metálicos flexibles ofrecen un diseño que aporta gran flexibilidad y una sólida protección física contra daños mecánicos, además de una excelente resistencia contra el ataque de agentes químicos. Por eso, los tubos metálicos flexibles son la solución perfecta para el diseño de instalaciones en edificaciones residenciales y comerciales, así como en entornos industriales de todo tipo.
¿Qué aplicaciones tienen los tubos metálicos flexibles?
Además de la versatilidad y flexibilidad que aportan a cualquier diseño, los tubos metálicos flexibles permiten realizar instalaciones que incorporan una alta resistencia a la presión, a los esfuerzos de tracción y a los impactos, una aceptable resistencia a los ataques de agentes químicos, además de poder soportar, sin perder su funcionalidad, de un amplio rango de temperaturas de operación (de -200 ºC a +650 ºC).
Pero quizás, lo más destacable es que la instalación de tubos metálicos flexibles permite absorber las dilataciones y movimientos derivados de los cambios de temperatura, además de soportar con garantías los efectos mecánicos producidos por movimientos y vibraciones de equipos como bombas o compresores.
Así, las mangueras corrugadas de acero inoxidable se utilizan, por ejemplo, como elementos de traceado calefactor flexible, también se usan como tubo flexible en intercambiadores de calor. En la industria, las mangueras corrugadas se utilizan como tubería flexible para el transporte de sustancias químicas, o como latiguillos de alta presión empleados para el transporte de gases industriales o medicinales. También se utilizan las mangueras y latiguillos en el diseño de los sistemas hidráulicos de máquinas, elevadores y prensas. También, y no menos importante, son las aplicaciones de mangueras de uso sanitario para la conducción de agua potable en instalaciones de grifería de la mayoría de cocinas y baños de nuestras casas.
Por otro lado, los tubos metálicos flexibles agrafados ofrecen la estanqueidad necesaria para ser usado como mangueras de aspiración y soplado. Otro uso importante de las mangueras agrafadas es como tubo de protección exterior para contener el cableado de instalaciones eléctricas y de fibra de vidrio, o como elemento de protección general para todas aquellas aplicaciones donde se necesite de una alta resistencia mecánica.
En definitiva, el uso de los tubos metálicos flexibles, en cualquiera de sus modalidades, es muy habitual en ingeniería y arquitectura, debido principalmente a las excelentes propiedades que ofrece este tipo de producto que combina versatilidad con resistencia, aspectos claves en cualquier diseño arquitectónico o industrial.
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